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    Los expertos coinciden en que la productividad en el trabajo del conocimiento depende aún más de los aspectos cualitativos que de los cuantitativos. En otras palabras, cuando hablamos de trabajo del conocimiento, el impacto de aquellos cambios que se centran fundamentalmente en variar los “más” y los “menos” sin modificar lo ya existente no influyen tanto en las mejoras de productividad como aquellos otros cambios que se centran en producir resultados “mejores” o “diferentes” a los actuales.

     

    Este planteamiento supone una ruptura radical con las formas tradicionales de entender la mejora productiva y esta profunda diferencia explica las resistencias que aparecen y la dificultad que conlleva realizar las necesarias transformaciones en las organizaciones.

     

    Sin embargo, el hecho innegable es que las empresas más competitivas a día de hoy en la economía del conocimiento no son aquellas centradas en hacer más de lo de siempre con menos de lo de siempre, sino precisamente aquellas que se centran en mejorar constantemente y en innovar más que nunca.

    Esta dificultad para cambiar que experimentan las organizaciones hace que el papel del directivo, y del responsable de equipos en general, se convierta en un elemento absolutamente clave para el proceso de transformación, que exige la adaptación a esta nueva realidad.

     

    Hoy en día, una organización productiva es aquella en la que la gran mayoría de sus miembros son productivos, es decir, se comportan sistemáticamente de forma productiva. Y la forma más rápida y sencilla de conseguir una organización así es que sus directivos y responsables se comporten de forma habitual como personas productivas.

     

    Un directivo o responsable de equipo que confunde hiperactividad con productividades uno de los principales motivos de improductividad y frustración para las personas de su equipo.

    Por el contrario, un directivo o responsable de equipo con hábitos productivos es un facilitador y un catalizador del cambio para sus colaboradores, a la vez que un ejemplo de que una forma mejor y más eficaz de trabajar es posible.

     

    Las organizaciones necesitan, hoy más que nunca, estos nuevos directivos y responsables de equipo para que lideren el cambio necesario.

     

    Como decía Gandhi, se trata de ser el cambio que deseas ver en el mundo, así que piensa por un momento: ¿Qué modelo e productividad quieres ser para tu pyme?

     

     

     

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