Las empresas pueden definirse como más o menos responsables socialmente según la forma en que realizan sus negocios. El concepto de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) está relacionado con la ética y transparencia en la gestión de los negocios, reflejándose en la toma de decisiones que pueden repercutir en la sociedad, en el medio ambiente y en el futuro del propio negocio.
Podríamos partir de la premisa que la ética en los negocios aparece cuando las decisiones que se toman en la empresa se hacen respetando el derecho, los valores y los intereses de todos quienes se encuentran en su ámbito de influencia.
La transparencia también forma parte del concepto de RSE. En este sentido, la falta de transparencia en la conducción de los negocios puede perjudicar no sólo a clientes y consumidores, sino también a la propia empresa.
Una buena manera de redondear todo lo mencionado es recurriendo a la definición de RSE que da el Instituto ETHOS de Brasil: “Responsabilidad Social Empresarial es la forma de gestión definida por la relación ética y transparente de la empresa con todos los públicos con los cuales se relaciona, y por el establecimiento de metas empresariales compatibles con el desarrollo sustentable de la sociedad, preservando recursos ambientales y culturales para las futuras generaciones, respetando la diversidad y promoviendo la reducción de las desigualdades sociales”.
Personas de todo el mundo esperan que las compañías hagan por la sociedad más de lo que su propio negocio les exige. El 75% de la población mundial considera que tanto el sector público como el privado, no están contribuyendo para mejorar la comunidad en general con respecto a temas como salud, energía, empleo, educación y agua.
La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) se ha transformado en un factor de competitividad para los negocios. Fabricar productos o prestar servicios que no degraden el medio ambiente, promover la inclusión social y participar del desarrollo de la comunidad de la que forman parte, entre otras iniciativas, son factores diferenciales importantes para las empresas en la conquista de nuevos consumidores o clientes.
Audi Consulting
Las empresas pueden definirse como más o menos responsables socialmente según la forma en que realizan sus negocios. El concepto de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) está relacionado con la ética y transparencia en la gestión de los negocios, reflejándose en la toma de decisiones que pueden repercutir en la sociedad, en el medio ambiente y en el futuro del propio negocio.
Podríamos partir de la premisa que la ética en los negocios aparece cuando las decisiones que se toman en la empresa se hacen respetando el derecho, los valores y los intereses de todos quienes se encuentran en su ámbito de influencia.
La transparencia también forma parte del concepto de RSE. En este sentido, la falta de transparencia en la conducción de los negocios puede perjudicar no sólo a clientes y consumidores, sino también a la propia empresa.
Una buena manera de redondear todo lo mencionado es recurriendo a la definición de RSE que da el Instituto ETHOS de Brasil: “Responsabilidad Social Empresarial es la forma de gestión definida por la relación ética y transparente de la empresa con todos los públicos con los cuales se relaciona, y por el establecimiento de metas empresariales compatibles con el desarrollo sustentable de la sociedad, preservando recursos ambientales y culturales para las futuras generaciones, respetando la diversidad y promoviendo la reducción de las desigualdades sociales”.
Personas de todo el mundo esperan que las compañías hagan por la sociedad más de lo que su propio negocio les exige. El 75% de la población mundial considera que tanto el sector público como el privado, no están contribuyendo para mejorar la comunidad en general con respecto a temas como salud, energía, empleo, educación y agua.
La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) se ha transformado en un factor de competitividad para los negocios. Fabricar productos o prestar servicios que no degraden el medio ambiente, promover la inclusión social y participar del desarrollo de la comunidad de la que forman parte, entre otras iniciativas, son factores diferenciales importantes para las empresas en la conquista de nuevos consumidores o clientes.
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